Comienza diciendo: Hoy vamos a hablar sobre tres tipos diferentes de oración. Luego de que explique cada una, van a orar en silencio en forma individual, entre tú y Dios
Cierren sus ojos y piensen en el tipo de oración del que les voy a hablar.
Nuestro primer tipo de oración tiene que ver con áreas en las que pecamos, pero no tanto como lo hacen otros.
Quizás te copias en un examen, pero no te copias tanto como lo hacen otros compañeros. O tal vez hables de otros a sus espaldas de vez en cuando, pero no tanto como los que suelen "clavar un puñal en la espalda."
Ustedes saben las áreas en que pecan, pero quizás en algunas de ellas, no pecan tanto como lo hacen otros. Les daré dos o tres minutos para que hablen con Dios
sobre esto, y le pidan perdón.
Luego de unos minutos, di: Nuestro segundo tipo de oración también tiene que ver con áreas en las que pecamos, pero existen buenas razones o excusas para
hacerlo. Quizás ignoramos o despreciamos a otras personas porque así lo hacen los demás. O tal vez no defendemos a nuestros amigos porque ellos no nos defienden. Quizás le mientes a tus padres para no herirlos o porque ellos no te comprenderían si les dijeras la verdad. Hablen con Dios por unos minutos sobre estas áreas en las que pecan, pero creen tener excusas para hacerlo.
Después de varios minutos, di: Hemos hecho dos tipos de confesiones. En la primera nos comparamos con otras personas que son peores que nosotros. En la segunda admitimos que hicimos mal, pero tuvimos excusas para hacerlo. Ahora vamos a hablar de áreas en las que también pecamos, pero esta vez, no haremos comparaciones ni daremos excusas. Simplemente admitiremos que hemos pecado. Tal vez uses a una persona para tu propio beneficio. Quizás te gusta beber alcohol. Confiésenle a Dios sus pecados, sin comparaciones ni excusas. Confiesen que, aun cuando no son tan malos como algunas personas, están lejos de cumplir todos los mandamientos, y que, aun cuando tengan buenas razones para pecar, están equivocados.
Después de varios minutos, di: Acabamos de hacer tres oraciones de confesión. Estos tres tipos de oración son diferentes y no son nuevos. En Lucas 18:9-14 podemos encontrar otras oraciones de confesión.
Mientras leo, observen las diferencias entre estas oraciones.
Lee Lucas 18:9-14 en voz alta. Pregunta:
¿Cuáles son las diferencias entre las dos oraciones que acabo de leer?
¿En qué forma las tres oraciones que ustedes hicieron se comparan a las oraciones del fariseo y del cobrador de impuestos?
¿Por qué creen que Jesús dijo: "Este cobrador de impuestos volvió a su casa ya perdonado por Dios, pero el fariseo no"?
Cierren sus ojos y piensen en el tipo de oración del que les voy a hablar.
Nuestro primer tipo de oración tiene que ver con áreas en las que pecamos, pero no tanto como lo hacen otros.
Quizás te copias en un examen, pero no te copias tanto como lo hacen otros compañeros. O tal vez hables de otros a sus espaldas de vez en cuando, pero no tanto como los que suelen "clavar un puñal en la espalda."
Ustedes saben las áreas en que pecan, pero quizás en algunas de ellas, no pecan tanto como lo hacen otros. Les daré dos o tres minutos para que hablen con Dios
sobre esto, y le pidan perdón.
Luego de unos minutos, di: Nuestro segundo tipo de oración también tiene que ver con áreas en las que pecamos, pero existen buenas razones o excusas para
hacerlo. Quizás ignoramos o despreciamos a otras personas porque así lo hacen los demás. O tal vez no defendemos a nuestros amigos porque ellos no nos defienden. Quizás le mientes a tus padres para no herirlos o porque ellos no te comprenderían si les dijeras la verdad. Hablen con Dios por unos minutos sobre estas áreas en las que pecan, pero creen tener excusas para hacerlo.
Después de varios minutos, di: Hemos hecho dos tipos de confesiones. En la primera nos comparamos con otras personas que son peores que nosotros. En la segunda admitimos que hicimos mal, pero tuvimos excusas para hacerlo. Ahora vamos a hablar de áreas en las que también pecamos, pero esta vez, no haremos comparaciones ni daremos excusas. Simplemente admitiremos que hemos pecado. Tal vez uses a una persona para tu propio beneficio. Quizás te gusta beber alcohol. Confiésenle a Dios sus pecados, sin comparaciones ni excusas. Confiesen que, aun cuando no son tan malos como algunas personas, están lejos de cumplir todos los mandamientos, y que, aun cuando tengan buenas razones para pecar, están equivocados.
Después de varios minutos, di: Acabamos de hacer tres oraciones de confesión. Estos tres tipos de oración son diferentes y no son nuevos. En Lucas 18:9-14 podemos encontrar otras oraciones de confesión.
Mientras leo, observen las diferencias entre estas oraciones.
Lee Lucas 18:9-14 en voz alta. Pregunta:
¿Cuáles son las diferencias entre las dos oraciones que acabo de leer?
¿En qué forma las tres oraciones que ustedes hicieron se comparan a las oraciones del fariseo y del cobrador de impuestos?
¿Por qué creen que Jesús dijo: "Este cobrador de impuestos volvió a su casa ya perdonado por Dios, pero el fariseo no"?
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